Del Marketing Tradicional al Marketing de Influencia

Por: Alejandra Aqueche, Gerente País Guatemala

Contesta con sinceridad ¿cómo te sientes cuando estás viendo un contenido interesante en tu plataforma social favorita y, de repente, te ves obligado a interrumpirlo porque se activó un molesto anuncio?  Te doy una lista de mis sentimientos: frustración, enojo y repulsión…y por supuesto, no me provoca ningún impulso a la compra, todo lo contrario.

Con la llegada del marketing digital, algunos marketeros nos hemos perdido en el camino de la innovación.  Estamos cruzando una línea peligrosa, invadiendo la privacidad y saturando de anuncios los contenidos preferidos de nuestros clientes, pensando erróneamente que así vamos a lograr nuestros objetivos de negocio.

En mi país, Guatemala, transitar por las calles principales de la ciudad te genera el mismo sentimiento. En cada cuadra ves en exceso vallas, rótulos, perimetrales, anuncios de toda índole y hasta publicidad ambulante.  Lo mismo está sucediendo en la red, la saturación y el bullicio publicitario están mermando el impacto que las marcas pueden y esperan generar con cada campaña de marketing.

Entonces, ¿cuál debiera ser el camino correcto a seguir con la llegada de la tecnología y las redes sociales?  La respuesta es bastante sencilla, empieza a pensar en estrategias disruptivas, que hablen al oído de tu cliente de forma orgánica, donde no se sienta invadido ni incómodo con tu comunicación.

Repasemos algunas ideas:

  1. Incrementa tu comunicación reputacional

Es un hecho que los anuncios publicitarios tradicionales que hablan maravillas del producto, que ofrecen ofertas únicas en el mercado como 2×1 y descuentos de quemazón, han dejado de ser creíbles para las nuevas generaciones de consumidores. Ahora, nuestras marcas y empresas pasan constantemente por escrutinios rígidos y exigentes de reputación.

En mi trayectoria he visto gravemente afectadas a algunas marcas, llegando incluso hasta el punto de la quiebra, porque han generado daños ambientales irreversibles, porque han afectado la salud de sus trabajadores o peor aún, porque se han visto envueltas en temas de corrupción.  Por ello, es sumamente importante comunicar las acciones de proyección social y económico que realiza nuestra empresa.

Los contenidos noticiosos son altamente valorados por los consumidores, sobre todo los orgánicos, pues generan mayor impacto, credibilidad y mejor posicionamiento que un anuncio pagado.   Inclusive el rol del gerente de marketing se ha transformado, además de enfocarse en incrementar cuota de mercado también debe dar prioridad a incrementar el valor reputacional de su empresa con audiencias internas y externas.

Importante tomar en cuenta que cuando surge una crisis reputacional la opinión pública recordará las buenas noticias que leyó sobre la marca lo que generará un pensamiento de buena voluntad. Si no estás comunicando las cosas buenas que hace tu empresa en diferentes ámbitos, es momento de empezar a hacerlo.

  1. Implementa un marketing de contenidos poderoso con un componente de “storytelling”

El storytelling es una herramienta de comunicación muy poderosa que permite conectar y humanizar una historia convincente y relevante. Si buscas dentro de tu contexto de negocio, entre clientes, colaboradores, comunidades y proveedores, siempre habrá una historia que contar. Un relato que humanice tu marca y la haga conectar emocionalmente con tus audiencias.

Es importante que tomes en cuenta que el storytelling no se trata solo de narrar lo que quieres vender. Es un trabajo estratégico y colaborativo, donde lo fundamental es la capacidad de entender el contexto y los datos, procesarlos, definir su valor y comunicarlos oportunamente.

  1. Incluye en tu estrategia de comunicación a influenciadores de nicho

A los influenciadores debes entenderlos como canales de difusión de contenidos de valor hacia sus comunidades digitales. Esos contenidos son mucho más persuasivos que cualquier otro, ya que no proceden de la marca sino de un tercero al que le concedemos cierta autoridad y/o relevancia sobre determinados temas. Así, al momento de mapear los perfiles de posibles influenciadores que incluirás en tu estrategia comunicacional, debes analizar lo siguiente:

-Imprescindible que apliques un filtro reputacional. Si el influenciador se ha visto involucrado en contenidos inapropiados, vulgares o conductas éticamente cuestionables, que él sea tu canal de difusión puede generar en tus audiencias una asociación mental marca-influenciador que puede llegar a ser peligrosa. No te arriesgues y busca al influenciador más idóneo para tu target y para los valores de tu marca.  Pregúntate por qué sigues a ese influenciador y si ese motivo es coherente con lo que buscas para tu campaña.

-Recuerda que lo más importante es que el contenido sea orgánico, creativo y que fluya con naturalidad. Permite que los contenidos tengan la esencia de tu marca y la de tu influenciador, que la comunicación no se perciba comercial o montada.  Si no vigilas de cerca estos aspectos, las comunidades se darán cuenta y no lograrás el impacto esperado.

-La creatividad y el humor lo son todo. Las publicaciones, además de ser frescas y orgánicas, deben tener un componente creativo y divertido. Todos buscamos un momento de entretenimiento cuando vemos nuestras redes sociales, encontrar un contenido disruptivo que nos haga sonreír y ser más positivos. Recuerda que tu objetivo es conectar de la mejor manera.

-Involucra a influenciadores internos y desarróllalos como embajadores de tu marca empleador.  Muchas veces nuestra reputación de marca no se verá lastimada por factores externos, sino por factores internos.  Si los colaboradores están desmotivados, corres el riesgo de que tu comunicación a públicos externos se vea afectada negativamente. Busca entre tus colaboradores quiénes pueden inyectar e influenciar a tus audiencias internas, vuélvelos embajadores a largo plazo que quieran comunicar las cosas buenas que suceden adentro y motívalos para que repliquen los contenidos de la marca en sus redes personales con un #hashtag definido.

-Mídelo todo.  Lo que no se mide no se administra.  Cada acción acá propuesta debe tener indicadores de éxito. Al terminar tu campaña, toma el tiempo de preparar tu dashboard de resultados para replicar lo que funcionó y aprender de lo que no.

 

Te invitamos a asesórarte con nosotros sobre estos y otros temas de tendencia de la comunicación estratégica.  Escríbenos a info@cckcentroamerica.com.  ¡Te vemos por ahí!

Sobre la experta

Alejandra Aqueche es licenciada en comunicación social, con dos maestrías concluidas en marketing y administración de negocios. Además, posee un diplomado internacional de dirección del marketing estratégico.  Cuenta con más de 15 años de trayectoria profesional.  En la actualidad, Alejandra Aqueche lidera exitosamente la operación de la empresa CCK en Guatemala.

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