- Detrás de un traje, una mirada o una expresión hay historias que no imaginamos.
- El IPMe nos llevó a descubrir historias de nuestra gente, de sus familias, de su día a día, nos acercó a sus realidades y nos permitió aportar de varias formas para mejorar sus vidas.
El Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) es un instrumento elaborado por la Universidad de Oxford (a través de OPHI) y apoyado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Los países aplican esta herramienta para identificar las carencias de un hogar en las áreas de salud, educación y su nivel de vida. En Costa Rica, de forma pionera, Horizonte Positivo en conjunto con la Universidad de Oxford adaptó este instrumento para que fuera posible implementarlo en el sector privado, y así nació el IPMe , con el cual las empresas pueden detectar necesidades y áreas de vulnerabilidad y contribuir con la calidad de vida de sus colaboradores.
Para CCK nuestra gente es nuestro motor, por eso siempre velamos por su bienestar y su calidad de vida y, constantemente, buscamos formas innovadoras de hacerlo. Así, desde que conocimos el IPMe, en el 2017, supimos que debíamos implementarlo. Luego de 3 años de ser parte de la comunidad de empresas IPMe, lo hemos aplicado en dos oportunidades y ejecutado dos planes de acción para atender las necesidades que detectamos.
El primer año, aplicamos el instrumento en todas nuestras oficinas de Centroamérica y cubrimos 78 hogares. Nos acercamos aún más a nuestra gente y a sus familias, conocimos a fondo sus condiciones básicas de vida: salud, vivienda, educación, trabajo y protección social, y descubrimos realidades que no imaginamos y, al mismo tiempo, nos permitió tomar acciones.
Nos enfocamos principalmente en las áreas de educación financiera, trabajo y vivienda. Ofrecimos charlas en materia de finanzas impartidas por entidades aliadas, sensibilizando al personal acerca de la importancia de una buena salud financiera; promovimos la iniciativa Emprendamos entre familiares desempleados o con pequeños emprendimientos en la que recibieron orientación en distintas áreas para potenciar sus ideas de negocio y desarrollamos dos campañas de recolección de fondos que nos sirvieron para remodelar y reparar dos viviendas de nuestros colaboradores que requerían intervención inmediata.
A veces nos preguntamos ¿cómo podemos impactar nuestras sociedades o cómo podemos hacer un cambio en nuestros países? Comenzar en casa es el punto de partida. Seamos un modelo para que otras empresas, pequeñas, medianas o grandes implementen también el IPMe y contribuyan a mejorar las condiciones de vida de muchas familias.